Los vemos en el gabinete cuando nos sentamos en la silla de dentista pero, ¿sabes exactamente para que sirven? Los instrumentos básicos e imprescindibles en una bandeja de exploración que todo profesional de la odontología debe tener son el espejo de exploración, la sonda y las turbinas, entre otros.
El espejo de exploración dental es esencial para explorar, como su nombre indica, la cavidad oral. No solo se usa para tener una visión indirecta de aquellas zonas de difícil acceso, sino para separar en la boca. Son pequeños, adaptables y muy útiles.
La sonda es un pequeño gancho curvado, delgado y con un mango de metal, usado para tocar todos los dientes. Podemos encontrarla de dos tipos. La sonda periodontal se usa para evaluar los tejidos periodontales y sus extremos son más pronunciados. La sonda de exploración es el instrumento clásico por excelencia y con ella podemos comprobar cavidades, determinar el nivel de placa o sarro que podemos encontrar en los dientes además de la dureza que presentan de estos.
Por último hablamos de la turbina dental. Este instrumento rotatorio, que aunque cause cierta aprensión a algunos pacientes por el sonido que despide, se convierte en uno de los más útiles para el dentista. Se utiliza para varios procedimientos y tratamientos, desde rellenar cavidades hasta alisar los dientes pasando por eliminar la placa bacteriana.
¿Sabías para que se usaban estas herramientas dentales? Si la respuesta es no, ahora ya lo sabes.
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